Hola, que tal, espero te encuentres muy bien y bienvenido de nueva cuenta a mi blog. Como comenté hace un par de posts, estaré publicando contenido de mis álbumes de Flickr que no tienen asociado un artículo en este sitio, por ello verás que publico temas con fotos hechas hace ya algunos años.

En esta ocasión toca el turno de las fotografías que realicé el 23 de mayo de 2015. Las fotografías las realicé con una cámara Canon 6D y un lente 85 mm f/1.8, variando la apertura entre f/1.8 y f/2.8. El valor de ISO lo trabajé entre 800 y 1600. Las tomas las realicé entre 5 de la tarde y 9 de la noche aproximadamente. La temática fue retrato callejero (por no llamarla «Street Photography») y la locación, el Zócalo de la Ciudad de México.

En aquel momento se estaba llevando a cabo el evento de la “Feria de las Culturas Amigas 2015”, por lo que me pareció un buen lugar para realizar algunos retratos de las personas que ahí se encontraban. El horario en el que estuve disparando me permitió utilizar diafragmas abiertos, lo que ayudó a desenfocar bastante el fondo y así, aislar a los retratados. Por la misma razón, aproximadamente a las 7 de la noche, las luces de la ciudad empezaron a hacerse presentes, lo cual propició un ambiente en el que las luces también se observan desenfocadas dentro de mis composiciones.

En lo que se refiere a la post-producción, la mayoría de las fotografías las viré a blancos y negros. Aunque los valores ISO altos agregaron algo de ruido en las imágenes, a algunas de ellas les agregué un poco más de “grano digital” (ok, ya sé que no es grano, no estoy trabajando con film, pero no quería repetir la palabra “ruido”) para tener un poco más de textura. También quería que los retratos se vieran algo dramáticos, por eso exageré un poco el enfoque y la claridad de las imágenes y apliqué viñetas para oscurecer los extremos de las fotografías y dirigir la atención del observador hacia los personajes fotografiados.

Ahora bien, la parte interesante de esta sesión no fueron los detalles técnicos ni la edición, sino el momento mismo de las tomas. Estas fotografías son unas de las pocas donde me he metido entre la gente, a no mucha distancia, y me he atrevido a apuntar la cámara hacia sus rostros. Un 85 mm te permite estar algo lejos de la gente, pero con esa focal la lente no es un telefoto que te permita estar al otro lado de la acera y permanecer totalmente invisible para el fotografiado, y tampoco las tomas que hice fueron de cuerpo completo, la mayoría de ellas fueron tomas de medio cuerpo o a nivel de busto, eso significa que yo no me encontraba más allá de 5 metros de cada personaje fotografiado.

No soy tan arrojado como quisiera, por lo que algunas de las tomas que hice, las hice tomando al modelo de forma lateral o hasta de espaldas, pero cuando veas la galería, verás que hay algunas donde me atreví a tener al modelo de frente, algunos de ellos alcanzaron a ver directamente a la lente al momento de hacer el disparo. Esas tomas fueron, para mí, las que más adrenalina me generaron; tiendo a ser respetuoso de la intimidad de las personas, pero cuando tomo la cámara y estoy frente a la gente en una calle, surge en mi mente una pelea entre ese sentimiento de respeto y el deseo de hacer imágenes que capturen la personalidad del retratado, su forma de reír, su forma de enojarse, su forma de estar ausente, extraviado o meditabundo. Cuando estoy parado en la calle con la cámara en mano y veo pasar la gran diversidad de personajes que caminan a mi alrededor, me peleo, discuto y me enojo conmigo mismo por no atreverme a ser indecente e irreverente y captar imágenes a diestra y siniestra, pero cuando logro dar el primer paso, y tomar la segunda, la tercera imagen, me siento libre, me siento tranquilo conmigo mismo, dejo de sentirme “fotógrafo mediocre y miedoso” y simplemente me entrego al miedo, sí, al miedo que no desaparece pero que se amortigua cuando me doy cuenta que ese señor no me reclamó, que aquel muchacho no se me aventó para golpearme, que esa señora siguió inmersa en sus pensamientos, aún después de haber tomado la fotografía.

Esta sesión es una de las que más he disfrutado en lo que se refiere a la fotografía de calle, en lo que se refiere a robar retratos a desconocidos, porque fueron varios picos emocionales de miedo-satisfacción que me regalaron algunas imágenes que aún disfruto cada vez que las veo. Rara vez pido autorización a las personas para hacerles una fotografía, yo prefiero tomar la imagen casual, quiero captar a la persona tal cual es, no lo quiero posando, fingiendo una sonrisa que no le ha nacido naturalmente. Por ello verás que, salvo el cantante jamaiquino que se estaba presentando y posó para mi cámara, el resto de los personajes fueron capturados en su forma natural, sin pose alguna.

Para atreverme a realizar este tipo de fotografía, he intentado cultivarme un poco sobre el tema, leyendo algunos libros que, puedo afirmar, me ayudaron a dar un paso adelante hacia esa dirección. Al final del post compartiré algunos de esos títulos por si deseas tener un empujón como yo lo tuve.

Sobre mi propia experiencia en retratos callejeros, puedo dejarte algunos puntos que a mí me han sido de utilidad a la hora de estar frente a la gente:

• De ser posible, evita fotografiar a menores de edad. Si lo deseas hacer, pide autorización de él o los adultos que lo acompañen.
• Si eres terco y deseas la fotografía del infante sin autorización, intenta entonces no mostrar su cara o bien, si a pesar de todo, se ve su cara, intenta no crear una imagen que vulnerabilice o indigne su persona (situaciones de pobreza, hambre, desesperación, etc., si tu fotografía no ayudará al niño a no padecer alguno de estos problemas, no la hagas, no te aproveches del morbo).
• Un poco relacionado a la última parte del punto anterior, intenta no exponer las vulnerabilidades de la persona, respeta su dignidad. Es válido, desde mi punto de vista, hacer una imagen de una persona pobre, alguien en situación de calle, pero buscando la parte digna, como una sonrisa o tal vez un estado de contemplación y tranquilidad y no buscando la parte morbosa de la desesperación de la persona ante su situación.
• Si vas a hacer la toma de frente, puedes aplicar un pequeño truco por si te ven. Haz la foto de la persona, pero no bajes la cámara, haz como si estuvieras tomando otra cosa. Si bajas la cámara, nunca hagas contacto visual con la persona, mantén tu vista enfocada en otro punto. La persona dudará y pensará que tomaste fotografía de algo más y no de él.
• Sí no quieres arriesgar mucho, pide permiso para hacer la toma y, si aceptan, agradece al final. No es necesario acercarte, puedes hacer gestos a la persona indicando que deseas hacerle una fotografía e indicando un agradecimiento posteriormente. Otra forma de agradecer es mostrando la imagen y ofreciéndole enviar una copia cuando tengas las fotografías. Este punto úsalo solo como salvavidas si no logras empezar a robar imágenes, ya que en el momento en que la persona se de cuenta que será fotografiado, toda su naturalidad desaparecerá.
• Si le haces foto a artistas callejeros, o tal vez a gente en situación de calle, agradéceles con unas monedas. Si eres lo suficientemente extrovertido, platica con ellos y muéstrales tu trabajo.

La fotografía de calle es un reto que ofrece un alto grado de dificultad porque debes enfrentar muchos de tus miedos hacia las personas y la invasión de sus espacios, pero también ofrece una gran satisfacción cuando es bien lograda. Ahora bien, las imágenes que yo presento aquí no pueden ser catalogadas realmente dentro de la categoría “Street Photography” (según Wikipedia), son retratos callejeros simplemente. La Street Photography posee ciertas características básicas que en estas imágenes no se observan, y existen autores que rechazarían sin miramientos mis imágenes si se las presento como muestras de fotografía de calle (uno de ellos, Alex Coghe). Así que lo dejaré así, mis imágenes son, simplemente, retratos de calle de personajes desconocidos; dichas imágenes no presentan situaciones fuera de lo común en escenarios caótico, muchas de ellas no tienen nada que ver con el “momento decisivo” tal cual lo definiera Henri Cartier-Bresson, ni tampoco cuentan una historia. Si los conceptos sobre fotografía de calle no son un problema para ti, entonces espero disfrutes de la galería que dejo a continuación y deseo puedas comentar al respecto de ellas, ¿qué opinas?, ¿alguna te ha llamado la atención?, ¿alguna te puso a pensar sobre lo que estaría pensando el personaje fotografiado? Recuerda que puedes ver la galería original en Flickr y, si alguna de ellas te ha gustado, bajarte una copia.

Quiero agradecerte como siempre tu visita y lectura, me gustaría pedirte que, si el blog te ha gustado, le des like y compartas dentro de tus redes sociales usando los iconos que aparecen en la parte inferior del post. También, si deseas dejar comentarios de cualquier índole, puedes hacerlo usando el formato que aparece más abajo en esta página.

Ah!, olvidaba la lista de libros. Espero que sean de tu agrado, todos son gratuitos, en formato PDF y en inglés. Si alguna de las ligas no funciona, por favor, me lo haces saber para corregirlo:

• 100 Lessons from the masters of Street Photography. Eric Kim.
• The Street Portrait manual. Eric Kim.
• 31 days to overcome your fear of shooting Street Photography. Eric Kim
• The ultimate guide to Street Photography. James Maher – Digital Potography School.
• Street Photography, short guide. Kent DuFault.
• Street Faces. Thomas Leuthard.
• Street Photography. Thomas Leuthard.
• Going Candid. Thomas Leuthard.
• Collecting souls. Thomas Leuthard.

Hasta la siguiente y Happy Clicking!