Hola, que tal, espero que estés muy bien y gracias por darte un tiempo para leer mi blog.
Tal vez ya te hayas dado cuenta que soy un aficionado a la fotografía, me encanta la fotografía, puedo jactarme de conocer varias cosas sobre fotografía pero, en mis publicaciones, la fotografía solo es un pretexto para escribir sobre los lugares que visito, sobre las cosas que ha veces me pasan, o sobre cualquier otra tontería. Pocas veces una publicación mía será para explicar aspectos técnicos de la cámara, verás nada sobre composición, cero sobre técnicas, estilos ni reglas. Para eso hay muchos otros buenos sitios web, como el de DZoom, que lo recomiendo mucho si deseas aprender todo eso que aquí no encontrarás. O bien, si el inglés no es problema, DPS es otro sitio que te regala un montón de información muy útil.
Bueno, ya que me deslindé de responsabilidades docentes, ¿de qué va el post de hoy?, pues nada, solo quería comentar un poco sobre una sesión fotográfica que realicé en mi tierra, Culiacán Sinaloa, durante mis vacaciones de Semana Santa. Estas vacaciones me ofrecieron la oportunidad de realizar dos sesiones con modelo, y algunas tomas más a amigos y familiares que intentaba realizar con el mismo cuidado que si fueran para una modelo, eventualmente iré publicando esas otras fotografías.
En este caso, las tomas fueron para una modelo petite muy guapa, Cory, que llegó con una blusa de cuadritos azul-blanco y una falda blanca que entallaba bien su silueta. La idea era hacer un poco de retrato urbano y esa vestimenta juvenil quedaba bien para la idea. Quise empezar la sesión cerca de las 6:00 de la tarde para contar con una luz suave. Por el viaje, no llevaba varias cosas, como el octabox, pero si un rebotador y un flash por si fuera necesario (aunque el flash lo tenía sin difusor, por lo que traté de no usarlo para iluminar de frente, sino más bien para hacer una luz de recorte).
Algunas fotos se hicieron en el parque Las Riberas, tanto en uno de los puentes como en la parte baja, por donde hay una pista para correr. Otras fotografías las hicimos más hacia el centro, en un callejón y otra en una calle ya solitaria (eran las 8:00 de la noche aproximadamente).
Cory es, como mencioné, una modelo con experiencia por lo que muchas de las poses salieron de ella misma, fue poco lo que tuve que dirigir, algo que fue muy cómodo para mí pero, por otro lado, nunca he sido bueno para la dirección de modelos, así que cuando tengo la oportunidad de hacerlo, me sirve de aprendizaje pero esta vez fue algo que no tuve.
La sesión en general me pareció muy buena, la disposición de Cory excelente, las locaciones me agradaron mucho, y más me agradó la facilidad de estar en esos lugares y hacer las fotos sin problemas, sin tener que lidiar con permisos, o estarse cuidando de la policia, ni nada, solo algunos ojos curiosos y un comentario de un paseante que me dijo, «oye, que guapa está tu modelo»…, yo solo dijé «ajá», y me quedé pensando «hey!, diselo a ella, ¿a mí que me tienes que decir eso?»…, si, lo se, a veces soy un poco mamila pero es algo que no puedo evitar, lo siento.
Las tomas las hice con una Canon 6D Full Frame, y un lente que adoro aunque a veces me cueste trabajo el enfoque, un Super Takumar 135 mm f/2.5, una belleza de lente, en aperturas máximas me encanta el bokeh que me genera, en luz suave, me gusta la saturación de colores que le da a la imagen, un pequeño monstruo que se construyó entre 1965 y 1980. Es un lente analógico que utilizo con un adaptador para el cuerpo de la 6D. A medida que se hacía más tarde, fuí subiendo el ISO, hasta llegar, si no mal recuerdo, a valores de 1600 ISO, lo cual para mi no es problema, la 6D tiene un excelente manejo del ruido, y el que no logra eliminar, simplemente le ayuda a la imagen, a tener una cierta belleza en la textura, que es verdad, no se aprecia en la pantalla, pero en impresión, es grato ver esos «granos» digitales (si, ya se, los análogos me matarían si digo algo así frente a ellos, no puedo decir grano al no tratarse de haluro de plata lo que genera la imagen, por eso lo puse entre comillas).
Pero bueno, no quiero seguir con más bla bla bla, la sesión me encantó, la modelo también, además del vestuario, juvenil, tenía un buen maquillaje, mate, lo cual ayudó a que no tuviera reflejos en su piel. Y como al final lo que vale de todo lo que digo es que vean las fotografías, entonces aquí les dejo con la galería que, como siempre, podrán ver en mayor tamaño si visitan mi cuenta en Flickr.
De nueva cuenta, muchas gracias por tu visita, nos vemos la próxima y Happy Clicking!
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